Con los años descubrí que no sólo tenía dos opciones para formarme como ser humano, el que fuera bonita no significaba que iba a ser una persona hueca, siempre fui dedicada a mis estudios (salvo por un pequeño lapso en la preparatoria), me considero a mi misma divertida, sencilla, carismática y alguien con quien puedes pasar un buen rato, por lo que el final de ese refrán (para todas las mujeres como yo) cambió por completo: La suerte de la fea a las bonitas nos vale ma@#!&
Sin embargo en los últimos tres años me he visto en la penosa necesidad de eliminar a varios hombres de mi vida toda vez que mi virtud corre peligro a su lado, por ejemplo, una noche vino de visita un “amigo” de muchos años, todo iba bien hasta el momento de la despedida cuando me besó a la fuerza, no se detuvo ahí y lo intentó unas cuantas veces más. Sobra decir que la amistad se terminó en ese momento por la incomodidad que me causó.
Las siguientes amistades que intenté entablar con el sexo opuesto el resultado fue similar,
platicamos, nos entendemos, planeamos ir a algún lugar el siguiente fin de semana y cuando menos me lo espero ¡zaz! su boca ansiosa y manos indiscretas, intentan sin éxito obtener una respuesta positiva de mi parte, misma que resulta en un adiós definitivo.
Honestamente no estoy segura si tengo mal gusto para las amistades, si es culpa del alcohol que envalentona a los gentiles caballeros, si debería llevar un letrero en la frente que diga “no intentes nada”, si necesito cambiar mi sistema de amigos por amigas o simplemente dejar de ser amable con aquellos que tienen una mirada de “ya me gustaste y quiero todo contigo”.
Es posible que me lo tenga merecido por haber sido muy coqueta durante muchos años, aunque en mi defensa siempre fui clara desde un inicio con el tipo de relación que buscaba, si él quería lo mismo salíamos hasta que el interés de uno o ambos cambiaba. Lo difícil fue cuando creí que podíamos volver a ser amigos porque con dos copas encima todo valía por completo.
Así que después del último fin de semana donde nuevamente creí que podía conocer a alguien sin que él intentara acercarse a mi en un terreno distinto al de la amistad caí en cuenta que las bonitas definitivamente deseamos tener la suerte de las feas.
Quizá suena mal, pero he platicado y me enterado de casos de niñas bonitas que acaban siendo acosadas por el hermano feo de King Kong quien se auto declara como el único pretendiente sin el consentimiento de la chica en cuestión, molestándose cada vez que se entera por algún medio que su novia imaginaria salió con alguien más.
Por lo tanto caballeros, no se sientan ofendidos cuando son friendzoneados, la verdad es que las mujeres bonitas pueden tener muchos pretendientes de los cuales uno será elegido para algo más, pero ese periodo de tiempo podría durar muy poco, en cambio si te quieren sólo como amigo, significa que te quieren en su vida por mucho más tiempo, quieren compartirte sus problemas y su día a día contigo Y la confianza que tienen depositada en ti va más allá de la que el galán podrá obtener en algún punto.
Escrito por: Sue FC ❤
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