Recientemente platicaba con mi más comadre del mundo sobre una desavenencia que tuvo con su mejor amigo, porque al parecer el hombre se puso chipilito porque ella quería salir con otro grupo de amigos, etc. etc. por lo que el amable sujeto decidió jugar al mudo y no le contestaba ni las llamadas ni los mensajes… Semanas después me contó que se encontró al gentil caballero en la calle y se fueron juntos a su casa como si tal cosa.
Curiosa como soy, le pregunté si el “amigo” se había disculpado con ella, a lo que me contestó que no, porque su amistad era tal, que esas cosas no eran necesarias. Me quedé cavilando sobre la validez de la premisa. Ustedes que creen ¿la amistad anula la humildad y la capacidad de reconocer los errores?, ¿la confianza implica despreocuparse de la sensibilidad del otro? o ¿por ser mi amigo debe pasar por alto mi falta de educación y aguantar mis berriches?
En la perspectiva de mi comadre al parecer sí, hecho que me parece inadmisible toda vez que pedir una disculpa no demerita la calidad humana, sino por el contrario, son muestras de humildad y capacidad de reconocer los errores.
De igual forma me parece que las personas que consideramos nuestros mejores amigos son poseedores de una parte mayor de nuestro corazón que el resto de los conocidos, por lo tanto sus acciones y palabras pueden incidir en nuestro ánimo. ¿Entonces cómo es posible que si nos portamos maleducados con ellos no debamos reconocer nuestros errores y disculparnos?
Para mí no es lo mismo que mi vecina me diga que soy una maldita bruja a que me lo digan mis amigas de toda la vida. La vecina puede opinar de mi lo que más le guste y no me tomaría el tiempo ni siquiera de preguntarle el porqué, pero si mis comadres piensan eso de mí, me sentiría triste si no lo soy o las felicitaría por observadoras en caso de que fuera cierto, pero definitivamente su opinión podría influir en mi comportamiento.
Además, estoy convencida que el ejercicio de analizar mi conducta me puede hacer mejor persona sobre todo si tengo la capacidad de reconocer cuando no fue la adecuada o actué en detrimento de alguien que quiero ¿Qué mayor reconocimiento de esta reflexión que disculparme?
Me molesta que alguien se porte poco educado conmigo y la siguiente vez que me vea finja que nunca pasó y actúe como si tal cosa. Tampoco se trata de torturar al que tiene a bien disculparse, ni tampoco tomar ventaja o revancha de su actitud reflexiva y hacerlo sentir la persona mala del circo, pero definitivamente admiro, quiero y respeto a quien reconoce que debe pedir perdón.
Mi hija probablemente opiné que todo es cuestión de edad, que pienso de esa manera porque Maximiliano de Habsburgo nos enseñó a ser corteses y educados pero actualmente la mala educación está de moda y que mejor que ser groseros con las personas que nos importan ¿o no?
Escrito por: Lu Co
viernes, 27 de noviembre de 2015
jueves, 26 de noviembre de 2015
Relaciones pasadas vs relaciones presentes
La semana pasada mientras esperaba a que mi clase comenzara, salí del edificio para fumar un cigarro, junto a la mesa donde me encontraba sentada había una pareja platicando, rara vez prestó atención a lo que otros conversan y al igual que esas veces creí que eso pasaría hasta que las palabras de ella hicieron que mis oídos se pusieran atentos…
Ella: Acabo de leer un artículo que me encantó, se llama “haz lo que sea para que no parezca amor”
El: ¿De qué trata?
Ella: Básicamente dice que las relaciones de ahora ya no son como las de antes.
El: Las relaciones de antes estaban de la chingada.
Ella: Claro que no, porque ahora ya nadie se compromete, todos se agarran con cualquiera y no les importa
No pude evitar sonreír cuando él dio su opinión sobre las relaciones anteriores y menos aun cuando vi la cara que ella puso, tuve que contenerme a mí misma para aplaudir por el acertado comentario de él, estoy completamente de acuerdo con que antes se perdían de muchas cosas por miedo al qué dirán y no dudo que aún existan personas que se preocupen por lo que otros piensan, especialmente las mujeres quienes se agobian por mantener una imagen de santa y se olvidan de disfrutar de los placeres de la vida
Aunque seguramente ella pensó en todo lo que se ha perdido con el paso de los años y si bien no se han perdido en todo el sentido de la palabra, definitivamente no son como antes, pero ¿a qué se refiere la gente cuando se queja sobre el drástico cambio que han sufrido las relaciones?
Estoy casi segura que la gran mayoría son mujeres, quienes creen que las relaciones pasadas se trataban de darse tiempo para conocerse y para ser conquistadas, en esfuerzos continuos de sus galanes quienes pasaban noches en vela pensando en cómo ganar su corazón, con serenatas, cartas, flores y demás, pero ¿realmente esas son las relaciones que querían? ¿Esperar días, semanas o meses para dar el siguiente paso como a una relación formal o tener sexo?
Si a eso se referían me parece un completo absurdo y en definitiva prefiero las relaciones de ahora, claro que los detalles románticos siempre son lindos pero es una idea que le atribuyó a las películas Hollywoodenses (como habrán podido notar en diferentes artículos), pero eso de esperar para dar un paso más, ¿qué hay de malo en dejarse llevar por el momento? ¿Qué pasaría si el galán del momento o tú por azares del destino tuvieran un trágico final? No tenemos asegurado un mañana y creo firmemente que es mejor decir “ups” a “que hubiera pasado si….”
Así que desde mi punto de vista, las relaciones de hoy en día son mucho mejores que las de antes, porque la gran mayoría vivimos el día a día, no necesitamos esperar mil años para saber si queremos compartir un momento especial con otra persona, lo cual me parece una idea romántica.
Soy muy apegada a la idea de hacer las cosas hoy, que tal si me gusta, de ese modo podría repetirlo al día siguiente, sobre todo si se trata de un beso o del sexo, tengo la plena certeza que el cuerpo como sea pero el corazón no hay que darlo a la primera, después de todo el sexo siempre es bueno para el corazón y el amor no.
Ella: Acabo de leer un artículo que me encantó, se llama “haz lo que sea para que no parezca amor”
El: ¿De qué trata?
Ella: Básicamente dice que las relaciones de ahora ya no son como las de antes.
El: Las relaciones de antes estaban de la chingada.
Ella: Claro que no, porque ahora ya nadie se compromete, todos se agarran con cualquiera y no les importa
No pude evitar sonreír cuando él dio su opinión sobre las relaciones anteriores y menos aun cuando vi la cara que ella puso, tuve que contenerme a mí misma para aplaudir por el acertado comentario de él, estoy completamente de acuerdo con que antes se perdían de muchas cosas por miedo al qué dirán y no dudo que aún existan personas que se preocupen por lo que otros piensan, especialmente las mujeres quienes se agobian por mantener una imagen de santa y se olvidan de disfrutar de los placeres de la vida
Aunque seguramente ella pensó en todo lo que se ha perdido con el paso de los años y si bien no se han perdido en todo el sentido de la palabra, definitivamente no son como antes, pero ¿a qué se refiere la gente cuando se queja sobre el drástico cambio que han sufrido las relaciones?
Estoy casi segura que la gran mayoría son mujeres, quienes creen que las relaciones pasadas se trataban de darse tiempo para conocerse y para ser conquistadas, en esfuerzos continuos de sus galanes quienes pasaban noches en vela pensando en cómo ganar su corazón, con serenatas, cartas, flores y demás, pero ¿realmente esas son las relaciones que querían? ¿Esperar días, semanas o meses para dar el siguiente paso como a una relación formal o tener sexo?
Si a eso se referían me parece un completo absurdo y en definitiva prefiero las relaciones de ahora, claro que los detalles románticos siempre son lindos pero es una idea que le atribuyó a las películas Hollywoodenses (como habrán podido notar en diferentes artículos), pero eso de esperar para dar un paso más, ¿qué hay de malo en dejarse llevar por el momento? ¿Qué pasaría si el galán del momento o tú por azares del destino tuvieran un trágico final? No tenemos asegurado un mañana y creo firmemente que es mejor decir “ups” a “que hubiera pasado si….”
Así que desde mi punto de vista, las relaciones de hoy en día son mucho mejores que las de antes, porque la gran mayoría vivimos el día a día, no necesitamos esperar mil años para saber si queremos compartir un momento especial con otra persona, lo cual me parece una idea romántica.
Soy muy apegada a la idea de hacer las cosas hoy, que tal si me gusta, de ese modo podría repetirlo al día siguiente, sobre todo si se trata de un beso o del sexo, tengo la plena certeza que el cuerpo como sea pero el corazón no hay que darlo a la primera, después de todo el sexo siempre es bueno para el corazón y el amor no.
Escrito por: Sue FC ❤
martes, 24 de noviembre de 2015
DISERTACIONES: SEGUNDA PARTE ¿QUÉ NOS GUSTA?
Mi querida compañera escritora de este blog me comentó que sería lindo que escribiera sobre lo que quieren las mujeres a mi edad de los hombres cuando se trata de relaciones sexosas… Hasta el momento no sé porque me lo pidió (jajaja), no tengo tanta información porque las mujeres son muy tímidas para platicar al respecto, aún con personas de su mismo género.
Pero quizá cuento con algo de experiencia, aunque recientemente debo reconocer que sufro de ataques de romanticismo, que no van tan de acuerdo con mi historial de vida, pero en fin.
Al igual que cualquier mujer, el primer paso para elegir a un amante, es que su físico se nos antoje, lo cual no implica necesariamente que sea el prototipo de la masculinidad griega, pero definitivamente que tenga “algo” que nos provoque arrancarle la ropa. Es muy importante que no tenga voz aguda y menos que hable como bebé, porque si lo hace a la hora de más acción, nos recordará a nuestros hijos, sobrinos o al compañerito de la primaria que nos caía mal.
Pocas mujeres pueden elegir a un hombre sólo para acostarse con él, casi siempre tejen una historia que abarca mínimo tres citas, por lo que preferimos a los hombres al menos un poco inteligentes, con quienes se pueda tener una conversación divertida o medianamente entretenida, lo que nos da un poco de esperanza en su creatividad a la hora del sexo. Lo cual no quiere decir bajo ninguna perspectiva que creamos en esa frase tan popular entre los caballeros: que sea una dama vestida y una pu… en la cama… definitivamente no, en el caso de los hombres, ellos entenderían que deben acostarse con todas nuestras amigas, hermanas, conocidas y hasta con la abuela postiza de nuestros hijos.
Una vez que superamos el proceso de selección, es básico que el sujeto no sufra de ansiedad o prisa y empiece a encuerarse y a desvestirnos desde el coche. Pero tampoco que tengamos que escuchar la historia completa de su vida, la de toda su familia, todas sus mascotas y de sus vecinos.
Al igual que a todas las mujeres, nos gustan los besos, las caricias y las palabras dulces que animan (particularmente aquellas que elevan nuestra autoestima, por favor nada de decir: pues no estas taaaaan mal o todavía aguantas).
Definitivamente no nos gustan los hombres pulpo, a menos que sean suaves y pausados. Si en algún momento les quitamos la mano de algún lugar, pueden estar seguros que no es por hacernos las interesantes, es definitivamente porque nos disgusta que toquen ese sitio.
No es lindo que saquen a relucir y muchos menos usar a su “mejor amiguito” antes de haber pasado por una buena sesión de calentamiento. Aunque hay mujeres ansiosas o con poca práctica que quieren jugar con él, entonces préstenselos sin mayor recato, seguramente se divertirán mucho.
Uno de mis tutores me convenció que un buen amante lo último que utiliza es al amiguito, toda vez que una falta de control puede terminar con el juego y dejar a la dama frustrada y enojada. Así que por favor no sean egoístas y aseguren la diversión de ella.
Siempre las actividades orales son una excelente opción, aunque recuerden que se trata de partes sensibles no de una paleta chupa chups y bajo ninguna circunstancia se vale morder. De igual forma, aunque no lo crean, los pezones duelen si no son tratados con cariño.
Si en algún momento su amigo no funciona de la manera que esperaban y decide tomar un descanso, por favor, no se vayan al baño a llorar, ni centren toda su atención en él dándole masajes de resuscitación, porque es entre aburrido y lastimoso ver sus intentos, sobre todo si son fallidos. El juego puede continuar y la mayoría de las mujeres a esta edad, si se percatan del incidente, gustosamente les ayudarán a solucionarlo, en caso de que tenga remedio o se trata de falta de inspiración.
Recuerden por favor que las películas pornográficas son ficción, son muy pocas las mujeres que se introducen a su amiguito a la boca porque les rete encante, salvo contadas excepciones (nunca diré si soy una de ellas), más bien lo hacen porque saben que les encanta, así que no abusen intentando obligarlas ni les sujeten fuertemente la cabeza o verán que tal se siente un buen mordisco.
Al 99% de los hombres les gusta el sexo por cavidades no oficiales, por favor si las mujeres no quieren o les da cosita, no las obliguen ni aprovechen un descuido para cometer una fechoría porque pueden llevarse un rosario de insultos y el juego se acabó… además de que seguramente no volverán a saber de ella.
En caso de que quieran un segundo, tercero, cuarto o quinto set, por favor déjenos respirar entre cada uno, porque al igual que a ustedes, la mayor parte de las veces si continuamos además de que podemos tener un ataque cardiaco, nos duele o da risa. Aunque tampoco se trata de que se ensimismen y nos ignoren. Nos encanta que nos abracen después de una buena partida.
Una vez que haya terminado el juego, nos encanta que nos digan que fue lindo y especial (aunque no sea cierto) y las flores o detalles nunca nos estorban en las citas subsecuentes o entre ellas.
En resumen… sinceramente no creo que haya mucha diferencia entre lo que quiere una mujer de más de cuarenta y una de veintitantos, todas buscamos un príncipe azul…aunque sea para cogerle cariño
Escrito pot: Lu Co.
Pero quizá cuento con algo de experiencia, aunque recientemente debo reconocer que sufro de ataques de romanticismo, que no van tan de acuerdo con mi historial de vida, pero en fin.
Al igual que cualquier mujer, el primer paso para elegir a un amante, es que su físico se nos antoje, lo cual no implica necesariamente que sea el prototipo de la masculinidad griega, pero definitivamente que tenga “algo” que nos provoque arrancarle la ropa. Es muy importante que no tenga voz aguda y menos que hable como bebé, porque si lo hace a la hora de más acción, nos recordará a nuestros hijos, sobrinos o al compañerito de la primaria que nos caía mal.
Pocas mujeres pueden elegir a un hombre sólo para acostarse con él, casi siempre tejen una historia que abarca mínimo tres citas, por lo que preferimos a los hombres al menos un poco inteligentes, con quienes se pueda tener una conversación divertida o medianamente entretenida, lo que nos da un poco de esperanza en su creatividad a la hora del sexo. Lo cual no quiere decir bajo ninguna perspectiva que creamos en esa frase tan popular entre los caballeros: que sea una dama vestida y una pu… en la cama… definitivamente no, en el caso de los hombres, ellos entenderían que deben acostarse con todas nuestras amigas, hermanas, conocidas y hasta con la abuela postiza de nuestros hijos.
Una vez que superamos el proceso de selección, es básico que el sujeto no sufra de ansiedad o prisa y empiece a encuerarse y a desvestirnos desde el coche. Pero tampoco que tengamos que escuchar la historia completa de su vida, la de toda su familia, todas sus mascotas y de sus vecinos.
Al igual que a todas las mujeres, nos gustan los besos, las caricias y las palabras dulces que animan (particularmente aquellas que elevan nuestra autoestima, por favor nada de decir: pues no estas taaaaan mal o todavía aguantas).
Definitivamente no nos gustan los hombres pulpo, a menos que sean suaves y pausados. Si en algún momento les quitamos la mano de algún lugar, pueden estar seguros que no es por hacernos las interesantes, es definitivamente porque nos disgusta que toquen ese sitio.
No es lindo que saquen a relucir y muchos menos usar a su “mejor amiguito” antes de haber pasado por una buena sesión de calentamiento. Aunque hay mujeres ansiosas o con poca práctica que quieren jugar con él, entonces préstenselos sin mayor recato, seguramente se divertirán mucho.
Uno de mis tutores me convenció que un buen amante lo último que utiliza es al amiguito, toda vez que una falta de control puede terminar con el juego y dejar a la dama frustrada y enojada. Así que por favor no sean egoístas y aseguren la diversión de ella.
Siempre las actividades orales son una excelente opción, aunque recuerden que se trata de partes sensibles no de una paleta chupa chups y bajo ninguna circunstancia se vale morder. De igual forma, aunque no lo crean, los pezones duelen si no son tratados con cariño.
Si en algún momento su amigo no funciona de la manera que esperaban y decide tomar un descanso, por favor, no se vayan al baño a llorar, ni centren toda su atención en él dándole masajes de resuscitación, porque es entre aburrido y lastimoso ver sus intentos, sobre todo si son fallidos. El juego puede continuar y la mayoría de las mujeres a esta edad, si se percatan del incidente, gustosamente les ayudarán a solucionarlo, en caso de que tenga remedio o se trata de falta de inspiración.
Recuerden por favor que las películas pornográficas son ficción, son muy pocas las mujeres que se introducen a su amiguito a la boca porque les rete encante, salvo contadas excepciones (nunca diré si soy una de ellas), más bien lo hacen porque saben que les encanta, así que no abusen intentando obligarlas ni les sujeten fuertemente la cabeza o verán que tal se siente un buen mordisco.
Al 99% de los hombres les gusta el sexo por cavidades no oficiales, por favor si las mujeres no quieren o les da cosita, no las obliguen ni aprovechen un descuido para cometer una fechoría porque pueden llevarse un rosario de insultos y el juego se acabó… además de que seguramente no volverán a saber de ella.
En caso de que quieran un segundo, tercero, cuarto o quinto set, por favor déjenos respirar entre cada uno, porque al igual que a ustedes, la mayor parte de las veces si continuamos además de que podemos tener un ataque cardiaco, nos duele o da risa. Aunque tampoco se trata de que se ensimismen y nos ignoren. Nos encanta que nos abracen después de una buena partida.
Una vez que haya terminado el juego, nos encanta que nos digan que fue lindo y especial (aunque no sea cierto) y las flores o detalles nunca nos estorban en las citas subsecuentes o entre ellas.
En resumen… sinceramente no creo que haya mucha diferencia entre lo que quiere una mujer de más de cuarenta y una de veintitantos, todas buscamos un príncipe azul…aunque sea para cogerle cariño
Escrito pot: Lu Co.
lunes, 23 de noviembre de 2015
Primera parte: ¿Qué nos gusta?
Recientemente, mientras la ociosidad se apodera de mí y hago de cuenta como si tuviera algo que hacer en el celular, me he encontrado con numerosos artículos con temas como “vuélvelo loco”, “lo que ellos esperan en la cama”, “cosas que harán que no te olvide”, “10 trucos para ser inolvidable”, etc.
Ansiosa y curiosa como soy he leído cada uno de ellos, para ser honesta dudo que sean escritos por hombres porque mencionan muchos clichés de películas y cosas poco sexosas pero en fin, no pude evitar preguntarme ¿por qué hay tantos “trucos” para ser su pervertida perfecta y no al revés?, así que me dispuse a escribir sobre lo que nosotras queremos y esperamos a la hora de jugar… al menos a mi edad…
Como toda actividad física se requiere de un buen calentamiento y no me refiero a ponerse a hacer círculos con cada parte del cuerpo, desde la cabeza hasta los pies, pero bien dicen que antes de meterse a bañar hay que prender el boiler, es horrible cuando el galán en turno va directo al punto, sobre todo porque ni siquiera estamos listas. A diferencia de los hombres necesitamos mucho más que un buen incentivo visual.
Hombres, antes de meter mano, empiecen con los besos y no sólo en los labios, los oídos y el cuello son una excelente opción, al igual que la espalda, recorran cada centímetro por encima de la ropa, repasen la cintura, la espalda, las pompis, las piernas, TODO.
Una vez que entramos en ambiente, no nos arranquen la ropa cuál escena de película, aunque en algunas ocasiones también puede ser divertido sobre todo si ambos tienen un arranque de pasión, pero por lo general preferimos que se tomen el tiempo al desvestirnos, cuál chocolate, vayan saboreando cada parte que van descubriendo.
Para ese momento es posible que ya estemos ansiosas de comenzar a echar maromas, pero les recomiendo que se esperen un poco más, antes de usar su juguete favorito, intenten usar las manos o la boca, en el caso de las manos no nos gusta que sean tan bruscos recuerden que somos muy sensibles en esas zonas, y no somos protagonistas de una película porno, sean delicados.
Ahora bien en caso de que decidan usar la boca, pregunten primero si le gusta a la chica con la que están, es posible que no le guste o no se sienta cómoda, (chicas si no lo han hecho se los recomiendo, es mil veces mejor, sobre todo si su galán sabe hacerlo). Hombres, es importante que presten atención a las reacciones de su chica, quizá tengan la teoría pero del dicho al hecho hay mucho trecho, si andan medio perdidos o desorientados, pregunten.
Cuando terminen los juegos previos y las maromas empiecen, no se olviden que están con nosotras y no con una muñeca inflable a la que pueden “embestir” cual animales, varíen las velocidad, si ella les pide que se detengan no se molesten, a veces nos parece incómodo o doloroso y no significa necesariamente que el juego acabo, simplemente busquen otra forma.
En mi particular punto de vista me encanta que me sorprendan con los cambios, si su chica es “manejable” aprovechen esa ventaja y sorpréndanla, sin dejar nunca de lado el resto de su cuerpo. Cuando finalmente decidimos tener sexo con ustedes estamos poniendo a su disposición una variedad de juguetes no sólo uno, así que por favor no se concentren sólo en una parte.
Y finalmente cuando ambos estén sonrientes, no den un brinco apenas terminó el encuentro y se vistan como si hubieran pagado por un servicio, nos gusta que se queden junto a nosotras y quien sabe, quizá después de un descanso puede comenzar el segundo tiempo…
Ansiosa y curiosa como soy he leído cada uno de ellos, para ser honesta dudo que sean escritos por hombres porque mencionan muchos clichés de películas y cosas poco sexosas pero en fin, no pude evitar preguntarme ¿por qué hay tantos “trucos” para ser su pervertida perfecta y no al revés?, así que me dispuse a escribir sobre lo que nosotras queremos y esperamos a la hora de jugar… al menos a mi edad…
Como toda actividad física se requiere de un buen calentamiento y no me refiero a ponerse a hacer círculos con cada parte del cuerpo, desde la cabeza hasta los pies, pero bien dicen que antes de meterse a bañar hay que prender el boiler, es horrible cuando el galán en turno va directo al punto, sobre todo porque ni siquiera estamos listas. A diferencia de los hombres necesitamos mucho más que un buen incentivo visual.
Hombres, antes de meter mano, empiecen con los besos y no sólo en los labios, los oídos y el cuello son una excelente opción, al igual que la espalda, recorran cada centímetro por encima de la ropa, repasen la cintura, la espalda, las pompis, las piernas, TODO.
Una vez que entramos en ambiente, no nos arranquen la ropa cuál escena de película, aunque en algunas ocasiones también puede ser divertido sobre todo si ambos tienen un arranque de pasión, pero por lo general preferimos que se tomen el tiempo al desvestirnos, cuál chocolate, vayan saboreando cada parte que van descubriendo.
Para ese momento es posible que ya estemos ansiosas de comenzar a echar maromas, pero les recomiendo que se esperen un poco más, antes de usar su juguete favorito, intenten usar las manos o la boca, en el caso de las manos no nos gusta que sean tan bruscos recuerden que somos muy sensibles en esas zonas, y no somos protagonistas de una película porno, sean delicados.
Ahora bien en caso de que decidan usar la boca, pregunten primero si le gusta a la chica con la que están, es posible que no le guste o no se sienta cómoda, (chicas si no lo han hecho se los recomiendo, es mil veces mejor, sobre todo si su galán sabe hacerlo). Hombres, es importante que presten atención a las reacciones de su chica, quizá tengan la teoría pero del dicho al hecho hay mucho trecho, si andan medio perdidos o desorientados, pregunten.
Cuando terminen los juegos previos y las maromas empiecen, no se olviden que están con nosotras y no con una muñeca inflable a la que pueden “embestir” cual animales, varíen las velocidad, si ella les pide que se detengan no se molesten, a veces nos parece incómodo o doloroso y no significa necesariamente que el juego acabo, simplemente busquen otra forma.
En mi particular punto de vista me encanta que me sorprendan con los cambios, si su chica es “manejable” aprovechen esa ventaja y sorpréndanla, sin dejar nunca de lado el resto de su cuerpo. Cuando finalmente decidimos tener sexo con ustedes estamos poniendo a su disposición una variedad de juguetes no sólo uno, así que por favor no se concentren sólo en una parte.
Y finalmente cuando ambos estén sonrientes, no den un brinco apenas terminó el encuentro y se vistan como si hubieran pagado por un servicio, nos gusta que se queden junto a nosotras y quien sabe, quizá después de un descanso puede comenzar el segundo tiempo…
Escrito por: Sue FC ❤
viernes, 20 de noviembre de 2015
DISERTACIONES: ESPÍRITU NAVIDEÑO
Debo confesar que no tengo bien claro cómo se siente o qué es el supuesto espíritu navideño que acompaña a las fiestas decembrinas, es más, estoy casi convencida que carezco de él. Dicen por ahí que se trata de festejar el nacimiento del niño Jesús -más bien debiera tratarse de un cumpleaños- y que además se junta con eso de las posadas y con el final de año. Y el sentimiento debe ser materialmente de “amor y paz” (y no es ese PAZ!!! al que muy seguido se refiere mi hija que es una sucia excéntrica).
Los medios de comunicación aprovechan para saturarnos de mensajes de dar, que el amor, los buenos sentimientos, la esperanza y quien sabe que tanto más y todo para que compremos aparatos electrónicos, juguetes, refrescos, ropa, coches y cualquier cantidad de objetos que no necesitamos.
En mi familia, particularmente a mi mamá y mi hermana, se les daba eso de transformar el sentimiento en regalos y adornos navideños, todo en su casa era verde, blanco y rojo… cosa rara, porque a mi más bien me parecía como de las Fiestas Patrias, de no ser porque seguramente los independentistas mexicanos no lucharon contra hombres regordetes de barbas blancas, ni iban montados en renos o tuvieron como aliados a muñecos de nieve y mucho menos utilizaron pinos decorados o bastones de caramelo para combatir contra los españoles.
En fin, supongo que en cada persona este espíritu se manifiesta de diferente manera, pero definitivamente hay un sector que a mí me inspira: Los Niños. No hay nada mejor que esa edad para creer en todo lo que se les dice, y más aún si les conviene, porque estos seres mágicos que inundan la época navideña vienen cargados de regalos para ellos.
Por la influencia de mi familia, mis pequeños hijos eran fieles creyentes de Santa Claus y los Reyes Magos, en la casa de mi mamá si conseguíamos que durmieran a buena hora, a la mitad del sueño y cuando estaban más atontados, podían ver a Santa que les daba juguetes y una ensarta de consejos apenas entendibles porque el disfraz le tocaba al más borracho de la fiesta.
Mis hijos aseguraban con su vida que estos seres mágicos existían y aunque en ocasiones no podían ser tan generosos por aquello de las crisis económicas, siempre recibieron algo, que mis pequeños no cuestionaban, toda vez que en lugar de escribir una carta pidiendo regalos, los convencí que era mejor hacer una confesión reflexiva de su comportamiento durante el año, por lo que una vez analizado, únicamente solicitaban que en caso de que fuera posible les hiciera llegar un regalo, lo que se merecieran después de haber expuesto todos los actos poco éticos que habían cometido durante el año.
Por supuesto que para mí no había nada mejor que leer esas cartas, en las que me enteraba de ¡cada cosa! que seguramente ni un policía judicial podría haber hecho confesar a alguien a base de toques y agua mineral.
Cuando alguien tuvo a bien romper el corazón y las ilusiones de mis hijos, el sentido de la navidad terminó para mí y desde entonces pasa por nuestras vidas como si fuera el 3 de abril o el 26 de febrero. Sin embargo, siempre tengo la fortuna de encontrar a alguien para quien sí es importante. Este año tendremos el gusto de contribuir con niños poco afortunados que han esperado 12 meses para recibir ese algo que saben nunca podrían tener por su nula capacidad adquisitiva.
Siempre es una placer contribuir con las personas menos afortunadas, es un gusto dar (aunque sea en navidad) a quienes no tienen nada, si algunos de ustedes puede hacerlo por favor no lo duden ni tantito, o mejor aún, hagan el esfuerzo de buscar a alguien que en verdad necesite una evidencia para mantener la ilusión, compartan lo que puedan que la vida seguramente se los devolverá.
Quizá justo es ese el ESPÍRITU NAVIDEÑO…
Escrito por: Lu Co
Los medios de comunicación aprovechan para saturarnos de mensajes de dar, que el amor, los buenos sentimientos, la esperanza y quien sabe que tanto más y todo para que compremos aparatos electrónicos, juguetes, refrescos, ropa, coches y cualquier cantidad de objetos que no necesitamos.
En mi familia, particularmente a mi mamá y mi hermana, se les daba eso de transformar el sentimiento en regalos y adornos navideños, todo en su casa era verde, blanco y rojo… cosa rara, porque a mi más bien me parecía como de las Fiestas Patrias, de no ser porque seguramente los independentistas mexicanos no lucharon contra hombres regordetes de barbas blancas, ni iban montados en renos o tuvieron como aliados a muñecos de nieve y mucho menos utilizaron pinos decorados o bastones de caramelo para combatir contra los españoles.
En fin, supongo que en cada persona este espíritu se manifiesta de diferente manera, pero definitivamente hay un sector que a mí me inspira: Los Niños. No hay nada mejor que esa edad para creer en todo lo que se les dice, y más aún si les conviene, porque estos seres mágicos que inundan la época navideña vienen cargados de regalos para ellos.
Por la influencia de mi familia, mis pequeños hijos eran fieles creyentes de Santa Claus y los Reyes Magos, en la casa de mi mamá si conseguíamos que durmieran a buena hora, a la mitad del sueño y cuando estaban más atontados, podían ver a Santa que les daba juguetes y una ensarta de consejos apenas entendibles porque el disfraz le tocaba al más borracho de la fiesta.
Mis hijos aseguraban con su vida que estos seres mágicos existían y aunque en ocasiones no podían ser tan generosos por aquello de las crisis económicas, siempre recibieron algo, que mis pequeños no cuestionaban, toda vez que en lugar de escribir una carta pidiendo regalos, los convencí que era mejor hacer una confesión reflexiva de su comportamiento durante el año, por lo que una vez analizado, únicamente solicitaban que en caso de que fuera posible les hiciera llegar un regalo, lo que se merecieran después de haber expuesto todos los actos poco éticos que habían cometido durante el año.
Por supuesto que para mí no había nada mejor que leer esas cartas, en las que me enteraba de ¡cada cosa! que seguramente ni un policía judicial podría haber hecho confesar a alguien a base de toques y agua mineral.
Cuando alguien tuvo a bien romper el corazón y las ilusiones de mis hijos, el sentido de la navidad terminó para mí y desde entonces pasa por nuestras vidas como si fuera el 3 de abril o el 26 de febrero. Sin embargo, siempre tengo la fortuna de encontrar a alguien para quien sí es importante. Este año tendremos el gusto de contribuir con niños poco afortunados que han esperado 12 meses para recibir ese algo que saben nunca podrían tener por su nula capacidad adquisitiva.
Siempre es una placer contribuir con las personas menos afortunadas, es un gusto dar (aunque sea en navidad) a quienes no tienen nada, si algunos de ustedes puede hacerlo por favor no lo duden ni tantito, o mejor aún, hagan el esfuerzo de buscar a alguien que en verdad necesite una evidencia para mantener la ilusión, compartan lo que puedan que la vida seguramente se los devolverá.
Quizá justo es ese el ESPÍRITU NAVIDEÑO…
Escrito por: Lu Co
martes, 17 de noviembre de 2015
DISERTACIONES: ETERNAMENTE ABANDONADA
Los seres humanos teóricamente somos seres sociales que nos gusta estar acompañados y/o rodeados de personas, además que buscamos emparejarnos, es decir vivir en pareja. ¿Pero qué pasa si nos volvemos intolerantes a las voluntades ajenas, y para colmo sabemos cómo queremos que sea nuestra vida? El resultado son seres convencidamente solteros.
Ese es mi estado permanente, pero seguramente no nací con la predisposición o igual y sí. Hace algunos días el comportamiento de dos sujetos me hizo reflexionar. Los gentiles caballeros decidieron que ya no querían ser mi “algo” porque no había respondido de manera inmediata a sus cuestionamientos, entonces concluyeron que yo los ignoraba y ambos decidieron que lo mejor era no verme más.
Estos incidentes fueron meramente circunstanciales; en pleno siglo XXI y con los múltiples canales de comunicación no presenciales a los que tenemos acceso, ambas charlas se llevaban a cabo a distancia. En el primero de los casos, estaba en la oficina cuando el hombrecito me cuestionó vía skype acerca de darle mi cariño a un sujeto como él, en ese momento me llamaron a una reunión y cuando volví, en la conversación tenía más de 15 renglones escritos por el futuro galán en los que desacreditaba mi calidad como persona al ignorarlo y negarme a responder a su petición.
Al principio me dio extrañamiento y luego mucha risa, lo único que contesté fue perdón tuve que salir a una junta y no había leído ni siquiera el primer cuestionamiento, pero fue demasiado tarde porque el sujeto se había salido de la conversación, seguramente despreciándome.
Días después conversaba vía mensajes de celular con otro hombre, quien argumentaba cosas innecesarias y para mí fuera de lugar. Salí a comer y durante más de media hora estuve contestando necedades, pero al final de la comida tuve que ir al banco, después a la oficina y atendí algunos asuntos que reclamaban resolución urgente, y cuando finalicé las gestiones, miré el celular y ¡ZAZ!
Me encontré con otro rosario de palabras desagradables hacia mi persona calificándome de ignoradora porque no había respondido en tiempo y forma a su solicitud de explicaciones, por lo que el buen hombre había decidido que lo mejor era no verme nunca más. Por supuesto y a fin de tranquilizar mi conciencia le ofrecí una disculpa aclarándole que me había ocupado y no había visto sus mensajes, pero el sujeto ya había abandonado la conversación y quizá enterrado su celular en el jardín.
En ambos casos, al siguiente día de sucedida la desavenencia, los sujetos se comunicaron conmigo, sin embargo el interés que podían haber despertado en mí se fue con su falta de paciencia y exceso de prejuicios hacia mí. Entonces sí me quedé muda y di por terminada para siempre la comunicación.
Esa es la historia de mi vida, específicamente de las aparentes relaciones serias que he tenido. Los sujetos cuando surge un contratiempo dicen me voy y yo contesto adiós, no sé rogar, ni intentó convencer, creo en sus palabras cuando dicen que ya no quieren estar conmigo, aunque debo aclarar que en el 100% de los casos se han arrepentido.
Según me cuentan esta es la dinámica de las relaciones, alguna de la partes se molesta y argumenta desde mi punto de vista de manera irresponsable, que todo se acabó, para que su contraparte le pida que recapacite porque… no sé cuál puede ser el porqué pero dicen alguno… Y entonces tienen una reconciliación… ¡que aburrido! ¿No se los parece? ¿Para que dicen que se van si no quieren hacerlo?
Lamentablemente conmigo chocan con pared… (y de piedra). No le encuentro gusto al jueguito y más si es entre dos personas adultas que saben lo que quieren. No podrían mejor intentar convencer con buenas razones o besos y cariños ¿Porque hacer el drama de irse y hacerse el insultado? NO creo que sea una estrategia aceptable, esta es una de las razones por las existen personas como yo “eternamente abandonadas” o “convencidamente solteras”.
Aunque no lo crean… busco en la vida a alguien a quien querer y que me consienta, pero sin tanta complicación, sin cuestionamientos, por el placer de ser y de compartir, y lo más importante, que sepa en donde y con quien quiere estar y no amenace con irse bajo ninguna circunstancia… a menos que ya tenga su maleta hecha porque así lo decidió sin molestia de por medio. Creo que estos seres están extintos, por favor si alguien conoce alguno, pídanle que me contacte, prometo que se divertirá mucho….
Escrito por: Lu Co
Ese es mi estado permanente, pero seguramente no nací con la predisposición o igual y sí. Hace algunos días el comportamiento de dos sujetos me hizo reflexionar. Los gentiles caballeros decidieron que ya no querían ser mi “algo” porque no había respondido de manera inmediata a sus cuestionamientos, entonces concluyeron que yo los ignoraba y ambos decidieron que lo mejor era no verme más.
Estos incidentes fueron meramente circunstanciales; en pleno siglo XXI y con los múltiples canales de comunicación no presenciales a los que tenemos acceso, ambas charlas se llevaban a cabo a distancia. En el primero de los casos, estaba en la oficina cuando el hombrecito me cuestionó vía skype acerca de darle mi cariño a un sujeto como él, en ese momento me llamaron a una reunión y cuando volví, en la conversación tenía más de 15 renglones escritos por el futuro galán en los que desacreditaba mi calidad como persona al ignorarlo y negarme a responder a su petición.
Al principio me dio extrañamiento y luego mucha risa, lo único que contesté fue perdón tuve que salir a una junta y no había leído ni siquiera el primer cuestionamiento, pero fue demasiado tarde porque el sujeto se había salido de la conversación, seguramente despreciándome.
Días después conversaba vía mensajes de celular con otro hombre, quien argumentaba cosas innecesarias y para mí fuera de lugar. Salí a comer y durante más de media hora estuve contestando necedades, pero al final de la comida tuve que ir al banco, después a la oficina y atendí algunos asuntos que reclamaban resolución urgente, y cuando finalicé las gestiones, miré el celular y ¡ZAZ!
Me encontré con otro rosario de palabras desagradables hacia mi persona calificándome de ignoradora porque no había respondido en tiempo y forma a su solicitud de explicaciones, por lo que el buen hombre había decidido que lo mejor era no verme nunca más. Por supuesto y a fin de tranquilizar mi conciencia le ofrecí una disculpa aclarándole que me había ocupado y no había visto sus mensajes, pero el sujeto ya había abandonado la conversación y quizá enterrado su celular en el jardín.
En ambos casos, al siguiente día de sucedida la desavenencia, los sujetos se comunicaron conmigo, sin embargo el interés que podían haber despertado en mí se fue con su falta de paciencia y exceso de prejuicios hacia mí. Entonces sí me quedé muda y di por terminada para siempre la comunicación.
Esa es la historia de mi vida, específicamente de las aparentes relaciones serias que he tenido. Los sujetos cuando surge un contratiempo dicen me voy y yo contesto adiós, no sé rogar, ni intentó convencer, creo en sus palabras cuando dicen que ya no quieren estar conmigo, aunque debo aclarar que en el 100% de los casos se han arrepentido.
Según me cuentan esta es la dinámica de las relaciones, alguna de la partes se molesta y argumenta desde mi punto de vista de manera irresponsable, que todo se acabó, para que su contraparte le pida que recapacite porque… no sé cuál puede ser el porqué pero dicen alguno… Y entonces tienen una reconciliación… ¡que aburrido! ¿No se los parece? ¿Para que dicen que se van si no quieren hacerlo?
Lamentablemente conmigo chocan con pared… (y de piedra). No le encuentro gusto al jueguito y más si es entre dos personas adultas que saben lo que quieren. No podrían mejor intentar convencer con buenas razones o besos y cariños ¿Porque hacer el drama de irse y hacerse el insultado? NO creo que sea una estrategia aceptable, esta es una de las razones por las existen personas como yo “eternamente abandonadas” o “convencidamente solteras”.
Aunque no lo crean… busco en la vida a alguien a quien querer y que me consienta, pero sin tanta complicación, sin cuestionamientos, por el placer de ser y de compartir, y lo más importante, que sepa en donde y con quien quiere estar y no amenace con irse bajo ninguna circunstancia… a menos que ya tenga su maleta hecha porque así lo decidió sin molestia de por medio. Creo que estos seres están extintos, por favor si alguien conoce alguno, pídanle que me contacte, prometo que se divertirá mucho….
Escrito por: Lu Co
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